sábado, 8 de mayo de 2010

¿SABES POR QUÉ CELEBRAMOS EL DÍA DE LA MADRE?

La celebración más antigua del Día de la Madre es mitológica. Empezó en la Grecia antigua, por las festividades en honor a Rhea, la madre de los Dioses Júpiter, Neptuno y Plutón.

A principios del siglo XVII Inglaterra empezó a dedicar el cuarto domingo de la Cuaresma a todas las madres operarias. En este día ellas eran dispensadas de sus trabajos para que se quedaran en casa con sus hijos y sus madres. En este día denominado "Domingo de Servir a la Madre", se celebraba con la preparación de un cake (torta).


Anna Jarvis: La madre del Día de la Madre

En los Estados Unidos, la primera sugerencia a la creación del Día de la Madre ocurrió por el siglo XIX, cuando la escritora Julia Ward Howe organizó en Boston un encuentro de madres dedicado a la paz.
A partir de ahí, la lucha por honrar a las madres la tomó Anna Jarvis, a principios del siglo XX, en una pequeña ciudad del Estado de Virginia Occidental. Acompañada por un grupo de amigas, Anna empezó un movimiento para instituir un día en que todos los niños pudiesen homenajear a sus madres.
Esa lucha la ayudó a salir de una profunda depresión debido al fallecimiento de su madre, y en poco tiempo la celebración se extendió por todo el país.
El entonces presidente Woodrow Wilson aprobó una resolución en 1914 por la cual se reservó el segundo domingo de mayo para la celebración nacional.
Con el tiempo, otros muchos países, de distintas partes del mundo, se fueron sumando a la celebración.


Un triste desengaño

La idea principal de Anna Jarvis era fortalecer los lazos familiares y el respeto por los padres. Un sueño realizado.
Pero con el tiempo, la celebración fue perdiendo el sentido para ella.
La popularidad de la fiesta hizo con que la fecha se convirtiera en un día lucrativo para comerciantes, principalmente para los que vendían claveles blancos, la flor que simboliza a la maternidad.

Anna Jarvis, que pasó prácticamente toda su vida luchando para que las personas reconociesen la importancia y el valor de las madres, entró en un proceso para anular el Día de la Madre, pero no tuvo éxito. "No he creado el día de la madre para tener lucro", dijo furiosa a un reportero, en 1923. Se murió en 1948, a los 84 años de edad.


No todos los países celebran el día de "Madre" en el mismo día.

Lo importante no es la fecha, lo importante es el reconocimiento y el recuerdo al valor de todas las madres.

CELEBREMOS EL "DIA DE LA MADRE"


La mayoría de los países lo festejan en el mes de Mayo frecuentemente el segundo domingo de Mayo.

Primer domingo de Mayo: España, Hungría, Lituania, Portugal, Sudáfrica
Segundo domingo de Mayo: Alemania, Australia, Austria, Bélgica (excepto Amberes) Brasil, Chile, China, Canadá, Colombia, Croacia, Cuba, Dinamarca, Ecuador, EEUU, Estonia, Filipinas, Finlandia, Grecia, Holanda, Honduras, Italia, Japón, Letonia, Liechtenstein, Nueva Zelanda, PERÚ, Puerto Rico, República Checa, Suiza, Taiwan, Turquía, Ucraia, Uruguay, Venezuela, (salvo excepciones donde se celebra el tercer domingo de Mayo)

8 de Mayo : Albania, Corea del Sur

10 de Mayo: Arabia Saudita, El Salvador, Emiratos Árabes Unidos, Guatemala, India, Malasia, México, Omán, Pakistán, Qatar, Singapur.

14 de Mayo: Samoa

15 de Mayo: Paraguay

26 de Mayo: Polonia

27 de Mayo: Bolivia (a causa de las Heroínas de la Coronilla)

30 de Mayo: Nicaragua
Último domingo de mayo: República Dominicana, Suecia.
Reciban todas las MADRES DEL MUNDO un afectuoso saludo de su amiga peruana
Bertha de Anderson

jueves, 6 de mayo de 2010

CUÁL ES?


¿El día más bello? Hoy.

¿La cosa más fácil? Equivocarse.

¿El obstáculo más grande? El miedo.

¿El mayor error? Abandonarse.

¿La raíz de todos los males? El egoísmo.

¿La distracción más bella? El trabajo.

¿La peor derrota? El desaliento.

¿La primera necesidad? Comunicarse.

¿Lo que más hace feliz? Ser útil a los demás.

¿El misterio más grande? La muerte.

¿El peor defecto? El mal humor.

¿La persona más peligrosa? La envidiosa.

¿El sentimiento más ruin? El rencor.

¿El regalo más bello? El perdón.

¿Lo más imprescindible? El hogar.

¿La ruta más rápida? El camino correcto.

¿La sensación más grata? La paz interior.

¿El resguardo más eficaz? La sonrisa.

¿El mejor remedio? El optimismo.

¿La mayor satisfacción? El deber cumplido.

¿La fuerza más potente del mundo? La fe.

¿La cosa más bella de todas? El amor. ¿Los mejores profesores? Los niños.

¿Las personas más necesarias? Los padres.

¿Una de las mayores alegrías? Tener amigos de verdad, saber que cuentas con alguien, aunque sepas que ellos no van a resolver tus problemas...


Pero toda esta belleza que encontramos en la vida... La tenemos gracias a los dones que Dios nos dio y a su infinito amor...

María Teresa De Calcuta

RENACERÁS


Cuando caminando tu vida encuentres siempre la misma piedra, llévala contigo.

Cuando pierdas un amigo cuando menos lo esperabas, consuélate por haberlo tenido.

Cuando la injusticia te deje desvalido sin aliento, Vuelve a creer.

Cuando ¡Amaste tanto! hasta perder la piel, recupérate pronto, te perteneces.

Cómo pájaro herido, descansa, cura tus alas, vuelve a volar.

Cuando tu vida se vuelva noche, no desesperes, busca las estrellas.

Cuando sientas ya tu existencia desperdiciada como un árbol seco, recuerda que la primavera siempre llega, aterciopelando rosas en tu mirada.

Encuentra tu manantial, riega siempre el jardín de tu vida.

Renacerás...

Así como he renacido yo una y mil veces.

(Anónimo)

lunes, 3 de mayo de 2010

LAS MUJERES SON VERDES





Autora : © Silvia Schmidt

Conversando con un viejo hombre, un joven reveló:
Hace mucho tiempo quiero conocer una chica y hoy, conseguí hablarle por teléfono, me quedé decepcionado
"¿ Pero por qué? ", indagó el viejo hombre.

-Yo le pregunté tímidamente como era ella; y ella riendo! respondió: soy verde.
¿" Y por qué la respuesta lo chocó? "
amigo, ella estaba burlándose de mí!
Oyendo eso, el viejo hombre se puso a hablar:
Mi joven, usted no entendió que ella estaba comparándose con un árbol

¿" Árbol? Como así?!? "
Niño, las mujeres son como los árboles:
Ellas clavan raíces en el suelo de nuestros corazones; tienen paciencia y capricho con el propio crecimiento; sus brazos son poderosos y, al abrazarlas, nuestros espíritus reciben renovadas energías. Ellas aman y cuidan de sus frutos, aún sabiendo que un día el mundo los llevará lejos de ellas.

Otras -aquellas que no dan frutos- ofrecen su sombra a aquellos que necesitan de descanso.
Cuando son azotadas por fuertes vientos de la vida, ellas emanan el perfume de la fuerza y de la fe, calmándonos, por más preocupante que sea la noche.

Su savia son las lágrimas de dolor o de alegría cuando en presencia de la hacha ofensor
o de la regadera de aquellos que las aman. Sus corazones van alto, lo suficiente para que escuchen más de cerca los recados del cielo.
Ellas reverdecen las florestas de los hombres, las calles de las ciudades, las avenidas, los acostamientos de carreteras y las ribas de ríos.
Ellas entienden el canto de los pajaritos y, más que nadie, ellas valoran y protegen sus nidos.
Soportan mejor la soledad y las vicisitudes que la Vida a las veces nos impone.

En el mundo, ellas nacen en mayor número para que el verde de la esperanza jamás empalidezca. Mi niño, todas las mujeres son árboles, todas las mujeres son verdes.

Al final de ese relato, reflejó el muchacho:
Yo tengo un triste jardín en el pecho: en él está faltando un árbol "...
y corrió para el teléfono más próximo ...


Gracias a mi querida amiga boricua Lourdes por hacerme llegar este hermoso mensaje.
te quierooooooooooo
Bertha